Cuánto has jugado.
Dime que has apostado.
Dicen que la vida
es una rueda de la fortuna
unas veces arriba,
otras abajo.
Gira la ruleta, apuesta
todo lo que eres en ella.
Qué más se puede perder
sí has puesto todo tu
ser en esto.
También se dice que
nadie juega
con cartas marcadas...
Toma una,
sé valiente:
arriesga tu resto.
Una vez,
lo jugué todo a ganar,
y me quedé sin ti,
sin mí, sin nada.
Por eso pregunto:
¿Cuánto has jugado tú?
¿Has apostado al desengaño?
¿O has tenido los naipes,
a tu favor y eres ganador?
A veces arriba,
otras abajo...
¿Será que el sino cambiará?
Abajo...
Abajo...una vez más...
Abajo...
Abajo...ya no más.
Que bello lo que subiste, como siempre. Realmente, ¿cuántas veces la persona que amamos puede sentirse orgulloso de haber arriesgado? Lo importante es jugar, sí resultamos lastimados, es parte del juego.
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