Tropiezo, no con objetos o
con alguna piedra como dice el refrán.
Trastabillo con algo intangible, no se ve pero se siente;
no se toca, pero se percibe.
Colisiono ante la lejanía, y esas
palabras que a veces hieren
y en otras ocasiones confunden.
Tropiezo.
Pero si caigo, me levanto:
no voy a a negar jamás lo que siento.
Lo prometo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario