Powered By Blogger

domingo, 11 de marzo de 2012

XLII

En absoluto se ha perdido,
sólo quedó guardada en
algún cajón, en un sitio
en el que estará hasta
que sea el momento preciso
para hacerte recordar 
que una vez, que una sola
vez, te sentiste amada.
Que una sola vez,
creíste que los sueños
podían ser realidad.
Esa carta, esa pequeña 
carta con pocas palabras
pero llena de sentimiento:
fue un sueño,
fue un deseo materializado.
Sea lo que sea,
quedará ahí, 
para que un día, cuando
seas una viejecita
sepas que pudo ser.
Pudo ser.










No hay comentarios:

Publicar un comentario